La Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una alerta por la aparición de una nueva variante del virus SARS-CoV-2, denominada Stratus.
Esta mutación, detectada inicialmente en Canadá y el norte de Europa, ha despertado la preocupación de la comunidad científica internacional debido a su rápida transmisión y posible capacidad de evasión inmune.
Stratus fue clasificada como "variante bajo monitoreo" por la OMS el 27 de junio de 2025, tras confirmarse su presencia en al menos 12 países, entre ellos Alemania, Francia, Reino Unido, Estados Unidos, México y Japón.
Aunque aún no se ha considerado una "variante de preocupación" (VOC), la OMS instó a los gobiernos a no bajar la guardia y a reforzar la vigilancia genómica, las pruebas de diagnóstico y la comunicación con la población, especialmente en zonas con baja cobertura de vacunación.
Entre las principales recomendaciones se encuentran:
Fomentar la vacunación y la aplicación de refuerzos con fórmulas actualizadas.
Usar mascarilla en espacios cerrados o con poca ventilación.
Estar atentos a síntomas prolongados y acudir al médico de ser necesario.
Realizar pruebas de diagnóstico ante casos sospechosos.
Reforzar la capacidad de respuesta sanitaria ante posibles brotes locales.
La OMS también pidió a los países mantener informada a la población y combatir la desinformación, que podría entorpecer las medidas de prevención
