Desordenan papás el plan alimenticio

ARTEGA, COAHUILA.- Aunque en el interior de las escuelas de Coahuila se mantiene una estricta supervisión para evitar la venta de comida chatarra desde hace tres meses, el problema persiste en los alrededores de los planteles, donde es común encontrar vendedores ambulantes que ofrecen este tipo de productos a los estudiantes.

Así lo señaló la diputada Magaly Hernández, quien hizo un llamado urgente a los padres de familia para que asuman un papel más activo y eviten comprar estos productos fuera

"Sí hay una gran supervisión dentro de las escuelas, tanto por parte del personal directivo como de las cooperativas escolares. Los maestros también participan y muchos padres ya optan por enviar lonches nutritivos a sus hijos", explicó la legisladora.

No obstante, enfatizó que los esfuerzos institucionales se ven limitados por la falta de regulación en el entorno inmediato a las escuelas.

La diputada recordó que ya había presentado un exhorto a los 38 municipios del estado para que vigilaran los perímetros escolares, donde la venta de productos ultraprocesados sigue siendo común.

"Ahí nosotros no podemos intervenir directamente, porque al final del día es el padre quien le da dinero al niño para que compre estos productos", apuntó.

Hernández expresó su preocupación por el impacto que estos hábitos tienen en la salud de la niñez coahuilense.

"Los niños llegan a casa ya sin hambre porque antes comieron algún tipo de comida chatarra. Es un tema de conciencia que debe iniciar en el hogar", señaló.

La prohibición de venta de comida chatarra dentro de las escuelas es una medida que ha avanzado en Coahuila, pero su efectividad está en riesgo si no va acompañada de acciones externas y del compromiso familiar.

La legisladora concluyó reiterando su invitación a madres y padres a reflexionar sobre los hábitos de alimentación que fomentan en sus hijos y a sumarse a una cultura de salud preventiva.

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Los vendedores están a unos metros de la puerta de las escuelas.

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