Jairo Medina Márquez viajó desde la ciudad de Sabinas para participar en la marcha feminista del 8 de marzo, acompañado de sus familiares originarias de Monclova, con el objetivo de exigir justicia por el feminicidio de su hermana Jimena, de 17 años de edad, quien fue asesinada en noviembre de 2024 por Arturo "N".
"El único que puede juzgar es mi Padre Dios, es el único que le puede dar la última sentencia. Ante todo, no le deseo el mal a nadie, pero me arrancaron lo que más amaba. Ahora mi hermanita está allá arriba con Diosito. Me dieron feo donde duele, me ha dejado un vacío", expresó Jairo con la voz entrecortada y al borde del llanto.
Jimena desapareció el 10 de noviembre en Sabinas tras haber sido invitada por un amigo a una fiesta. Luego de salir de su trabajo en un restaurante, aceptó acompañarlo confiando en él. Sin embargo, al llegar a la casa donde se suponía que sería la reunión, se encontró sola con Arturo "N", quien intentó abusar de ella. Al resistirse, él la asesinó.
El responsable del crimen, se encuentra detenido en Piedras Negras, y su última audiencia está programada para mayo, donde se espera que reciba sentencia.
La familia de la fallecida se unió por primera vez a la marcha del 8M en Monclova para visibilizar la violencia de género y exigir justicia.
"No es justo, yo creo que todas debemos poder salir con seguridad a la calle. Como madre de familia, es importante crear conciencia e inculcar valores desde la infancia para beneficio de la sociedad", expresó una de las primas de la víctima.
Para Jairo y su familia, su participación en la marcha fue un acto de lucha por Jimena y por todas aquellas mujeres que han sido víctimas de feminicidio, con la esperanza de que su caso no quede impune y que ningún otro hogar tenga que sufrir una pérdida similar.